La twink death de la AI generativa
Sobre el verano de las AI generativas, qué significa esto para el sueño de Web3, design thinking, y Defense Tech.
¿Cómo estás?
Feliz domingo.
El título de esta edición consiste de dos anglicismos pegados. Uno traducido, el otro no. Consideré escribir el título directamente en inglés, pero me resultó un tanto culorroto, así que lo evité.
Como fuese, hoy realmente tengo temas, así que esta introducción será lo más breve posible.
Mi canción de la semana es “Bicep” de TR/ST:
La twink death de la AI generativa
twink death (contable e incontable, plural: twink deaths)
(slang de internet) Pérdida de la apariencia juvenil de un twink como resultado del avejentamiento.
Fuente: Wiktionary
La “twink death” sucede cuando los achaques masculinizantes del tiempo comienzan a hacer mella en la androginia “segura” de un twink. La figura antes feminizada muta, convirtiendose en algo más parecido a un hombre estereotípico. Si la mente ha acompañado, la twink death es un pasaje a algo mejor, el twink gana un edge interesante. Para ponerme un tanto Kantiano, el twink pasa de lo bello a lo sublime.
Sin una transformación espiritual que acompañe, la twink death es el momento en el que el closet del twink se vuelve de mal gusto y se pasa de la belleza al ridículo.
A mis 2 lectores heterosxuales: No te asustes. La twink death es una figura que voy a usar, no un concepto en el que voy a seguir ahondando.
El sector de AI generativa está captando el grueso del venture capital. Y me es difícil pensar en una herramienta que no esté intentando forzar features AI-powered - Ya sea para captar inversión o “no quedarse atrás” a los ojos de un usuario que ya está instrumentalizando AI en su día a día.
El resultado de esto, vale la pena aclarar, es una redundancia terrible en el stack de herramientas que uno usa. Voy a ponerme un target en la espalda, pero: Estoy buscando una solución para automatizar ciertos procesos de outbound - y un “escritor AI integrado” no es una killer feature para mí. Ya pagamos por acceso a AI generativa - No voy a poner un premium para no tener que cambiar de pestaña.
Ahora bien, hay dos finales posibles para este boom.
Final A: Refinamiento significativo de los outputs en un plazo de tiempo corto. Regulación y costos de entrada altísimos - o internet se vuelve inutilizable.
Final B: Explosión de la burbuja y retiro a casos de uso genuinos, con un costo de entrada alto.
Como alguien que laburó en el boom de Web3 y hoy se encuentra en el fuego cruzado de las AI generativas, no puedo sino buscar paralelismos.
Veo en el boom de las AI el fracaso del sueño de la decentralización como forma de hacer internet, y el triunfo de los monopolios que ganan músculo gracias a acumular y procesar data a escala. Sale Nakamoto, entra Zuckerberg - si es que uno había entrado y el otro había salido.
Un comentario y pasamos a otra cosa: Como de costumbre, computing power (es decir, hardware) es poder.
La ética post-irónica del diseño gráfico
Hace unos días, retomé un rabbit hole y volví a algunas lecturas vinculadas al diseño “ético”, el diseño “especulativo” y todos esos constructos que hacen que un diseñador trabaje entre fundaciones y artistas, no entre publicistas y organizaciones con fines de lucro.
En mi investigación, descubrí The Falklands Project, de Jasmijn Visser y Metahaven. El micrositio es un buen documento de referencia, que constituye una (humilde) arqueología del conflicto por las Islas Malvinas, pero sirve tambien como ejemplo de lo patética que es la pretensión de neutralidad en el análisis de conflictos bélicos.
Una práctica de diseño “crítica” cuyo objetivo principal es diseñar como activismo está condenada a un estado de precariedad material que la va a poner al servicio de los peores intereses. El diseñador auteur geopolítico que quiere hacer de eso su carrera termina en algún lugar oscuro del complejo militar-industrial.
Quizás también te interese: El rediseño de la identidad visual de la CIA por Ryder Ripps.
Quienes me conocen saben que soy asquerosamente progresista. Sólo me desvío del dogma en dos materias, tan específicas que si las menciono sin profundizar, vas a entender cualquier cosa.
Como fuese, habiendo hecho voto cantado, voy a decir que el objeto de diseño más importante en materia política, en los últimos 15 años, es este:
Es un objeto político perfectamente funcionalizado. No comenta, acciona. Es rojo porque representa al Partido Republicano - ¿O es rojo porque el rojo llama la atención? Es una gorra porque las prendas son meméticas, y una gorra es one-size-fits-all, funcional, fácil de transportar, y barata de producir.
Ya lo dijo un diseñador anónimo:
Prefiero una práctica de diseño “funcional a los intereses del capitalismo” (todos lo somos al final del día), a una práctica anticapitalista que tenga que negociar por fuera de la lógica del capital, que es lineal y vana.
El otro sector que está acaparando VC bucks
Además de AI, hay otro sector captando la atención de los fondos de inversión.
Traduzco del pasquín Forbes:
“Startups de defensa, por ejemplo Anduril, representan un cambio en [el] enfoque tradicional: mientras que el ejército estadounidense históricamente ha priorizado el hardware sobre el software, Anduril coloca el software en el centro de su filosofía de defensa. Aprovechando tecnologías de vanguardia como la inteligencia artificial, el machine learning y la visión por computadora, Anduril es pionero en el uso de soluciones basadas en software en el cambiante panorama de la guerra.
A diferencia del método convencional de establecer especificaciones exhaustivas, Anduril construye sus productos a partir de principios básicos, centrándose en los requisitos básicos de la misión en lugar de especificaciones rígidas. Este enfoque permite una mayor adaptabilidad e innovación, una desviación del modelo tradicional impulsado por contratistas donde los productos se crean para cumplir con especificaciones predefinidas sin considerar el contexto más amplio de la misión.”
Anduril cerró una Serie E de $1.5 billones de dólares a finales del año pasado.
En términos de PR, el último palenque donde rascarse es el sueño de que la guerra sea una suerte de videojuego. Hoy, podemos decir que lo es - buscá cómo se pilotea un drone. Supongo que el sueño (al menos de la boca para afuera) es que se trate de un videojuego donde no muera gente.
El fin del design thinking
Ideo (la firma que popularizó el concepto de “design thinking”) está profundizando los recortes que comenzó en 2020.
Hace unos días, despidió al 25% de su planta y cerró oficinas clave (por ejemplo, su “hub” de Tokio).
Esta ola de despidos fue enmarcada por Fast Company como la consecuencia de “el fin del design thinking”.
Algo que vale la pena aclarar antes de proceder: Creo que el concepto de “design thinking” tiene como principal autor la bajísima tasa de interés de la Reserva Federal de Los Estados Unidos.
Citando a cierto candidato presidencial: “Es decir o sea”, “design thinking” es simplemente diseñar bien. Y el framework propuesto por Ideo es el ciclo de PDSA de William Dening (circa 1950) con un lavado de cara “human-centric”.
La chatez intelectual de cierto tipo de empresario que le baja el precio a la estrategia es bárbara e insostenible. Pero es cierto que existe un sector de la economía que subsiste a base de sobrecomplejizar lo simple y volver ilegible lo que solía ser claro.
Vease lo que dije sobre la “algorithmic optimization” como presunta instancia superadora del SEO.
Autor invitado
Tomo un momento para avisarte que la próxima edición no estará a mi cargo. En su lugar, le compartiré el espacio a un consultor amigo, que va a cubrir una moda peligrosa, vinculada con la industria automotor.
Buen momento para un chivo:
Hasta la próxima,
Aaron