Forismo 2.0, la maduración de Web3 y el sueño de un internet inusable
Además, un curioso problema de provenance y apropiación cultural.
Buenas noches,
Es un gusto compartir con vos una nueva edición de este newsletter aún sin un nombre apropiado.
Tengo mucho que compartirte, así que no voy a autoindulgirme con una introducción larguísima.
Mi canción de la semana es “Like a Friend” de Pulp:
Forismo 2.0
Desde mediados del año pasado, estoy colaborando en un proyecto supersecreto, con los muchachos de Círculo Vicioso.
A modo de sidequest necesaria, tuve que mudar su foro de un hosting a otro, y de un subdirectorio a un subdominio.
El proceso en sí era bastante sencillo. Pero se volvió tedioso por lo mal documentado que está vBulletin, el software del foro. Las respuestas que necesitaba estaban disponibles en internet, por supuesto, pero había que pescarlas en distintos mensajes de distintos threads, de distintos foros de soporte.
Esta experiencia frustrante me recordó por qué existe el SEO. Básicamente, el valor del SEO como estrategia de marketing se basa (o al menos debería basarse) en volverle sencillo al usuario encontrar la información que necesita.
Siento que acabo de sintetizar los dos principios que rigen a una práctica de SEO exitosa y responsable:
Discoverability - la pieza de información es fácil de encontrar y las respuestas son fáciles de detectar dentro del texto.
Valor genuino - el usuario no encuentra una fluff piece llena de lugares comúnes, encuentra algo que le sirve en serio.
Por supuesto, buena parte de la industria depende de estrategias cuestionables y está guiada por objetivos contrarios al interés del usuario. Así que, en lugar de actuar como bibliotecarios que ayudan a navegar la abundancia de información, muchos colegas abusan de sistemas y producen material inútil, optimizado para ser hallado, no para ser importante.
Otra observación intersante, producto de esta sidequest, es que se mantiene fuerte la figura del foro de soporte. PostHog, plataforma a la que quiero mucho, cerró su Slack y lo reemplazó por un foro de soporte propio.
Esto se siente como un próximo paso razonable, considerando que la compañía ya estaba:
Usando un sistema de upvotes y comentarios para recibir feedback y dar soporte dentro de su propio blog - features hermosas, si me lo preguntan.
El foro opera con el mismo sistema operativo que el resto del sitio, Strapi - no estoy al tanto de Strapi como CMS, pero una colega a quien respeto mucho se inmolaría por Strapi.
Con 5k miembros, de transicionar a un plan pago, este espacio comunitario le habría costado a PostHog más de 36k dólares por mes, cifra absurda.
Veo a otras startups yendo por el mismo camino que PostHog en el futuro. Y quizás veamos lo mismo en comunidades pagas que hoy encuentran un hogar en Slack.
Por lo general, el argumento pro-autonomía apenas condiciona a unos pocos. Recuerdo que hace unos años, trabajé con un cliente que se negaba a usar Google Drive por un asunto de ownership de la información. Entonces, cada ronda de feedback requería intercambiar docs y txts. La conveniencia siempre gana, y por eso big tech es políticamente peligroso. Pero el argumento financiero convence hasta a los más taimados.
La mayoría de las plataformas usan un procesador de pagos de un 3rd party en lugar de construir el propio, porque no queda otra. Pero si es más barato construirlo in-house, en esta época de retracción del ecosistema B2B SaaS, se va a construir in-house.
Por otra parte, GSAP rediseñó su sitio hace relativamente poco, y modernizó su foro, sin modificar su dinámica.
Un nuevo forismo va a venir de la mano de nueva tecnología y un nuevo look-and-feel.
Nota: En la segunda entrega de este newsletter, ahondé en por qué cuesta e importa construir una comunidad. Si te interesaría charlar más al respecto, podés enviarme un DM en Twitter.
La China Suárez: Precursora de lo Coquette
Hace dos semanas, compartí algunas observaciones sobre las “sad girls” y el “coquette-ismo”. En ese entonces, todavía había cierto allure indie en el término.
La estética coquette viene de Tumblr, que a pesar de su relativa masividad, nunca se vio explicitado en el mainstream. Con billones encima y headliners del Lollapalooza, seguía sintiendose “alternativo”. El coquette-ismo va a encontrarse con su destino sudamericano.
A días de la hermosa, conmovedora campaña de Lana Del Rey para SKIMS, la China Suárez se puso dos moños y varios medios locales la llamaron impulsora del Coquette.
La sobredigitalización de la vida y la metamorfosis de las tribus urbanas en meros “cores” dio origen a esto. Todo es una skin, todo es un disfraz. Mi recomendación es que se haga un doubling-down en lo neurótico de lo coquette. Gracias, Lana. Pero es hora de graduarse a Nicole Dollanganger.
En su transición a primera nueva tribu urbana, a las coquettes les recomiendo un artículo de David Chapman, titulado “Geeks, MOPs, and Sociopaths”. Básicamente, las coquettes que realmente entienden al coquettismo tienen que weaponizar su sociopatía, para prevenir que la escena se diluya. A menos que no sea una escena, si no un skin. Eso sería terriblemente deprimente para mí.
Web3 para el board
Hablando de skins y de escenas, recuerdo haber comentado que tuve una experiencia relativamente positiva en la BitConf del año pasado. Pero creo no haber compartido mis impresiones sobre Ethereum Argentina.
Fue el segundo evento de Ethereum en el Centro de Convenciones de Buenos Aires al que asistí. El primero fue Ethereum Latam. Y recuerdo dos panoramas sentimentales y de mercado muy distintos. En el primero, había un sentimiento bullish, impulsado por la novedad de los NFTs y mucho dinero nuevo ingresando al ecosistema. Dinero que venía de la mano de promesas de masividad B2C.
Y el año pasado, vi una concurrencia muchísimo menor - quizás por la escala nacional, no regional del evento, pero aún así, rara de justificar. Al final del día, Argentina es la meca de Cripto en Sudamérica. Pero además, vi un shift que sentí positivo: La mayoría de la oferta era B2B. Había un discurso hiper-tecnificado, y se le estaba hablando mayoritariamente a empresas construyendo cosas en blockchains.
Esto se alinea perfectamente con algo que vengo diciendo hace un tiempo, como persona que trabaja en el ecosistema y que hodleó criptos, pero que mantiene cierto nivel de escepticismo. Las mejores aplicaciones de las blockchains son B2B.
Desde esta columna, sigo ciertas obsesiones, semana a semana. Hay temas que se repiten y que, quiero creer, evolucionan de entrega a entrega. Uso estos párrafos para abrir una nueva línea de conversación sobre Web3 y B2B.
Scrollytelling
Hace unos años, algunos diseñadores/blogueros discutían el “scrollytelling” como el futuro edge competitivo del diseño web. 5-3 años después, el “scrollytelling” (utilizar animaciones on-scroll como dispositivo narrativo en sitios web), sólo habita un pequeño manojo de sitios, que parecen hechos para ganar premios.
Me gusta el scrollytelling como recurso. Lo considero particularmente interesante en sitios que no tienen que ser particularmente performantes, y que son un mero touchpoint en un proceso de ventas principalmente account-based y offline.
Si sos un exportador de aviones, no te van a encontrar por SEO. Meté un modelo 3D que gira on scroll.
Pero, siento que este recurso no se masificó por cuatro razones:
Costos - ¿Recordás lo que comentaba sobre los foros? Hacer scrollytelling correctamente encarece un proyecto de diseño web, y el impacto puede ser muy relativo.
Skills - Hacerlo bien requiere skills que sólo una minoría de equipos tiene. Esto vuelve a la implementación incluso más cara.
Accesibilidad - La mayoría de los usuarios accede internet mediante un dispositivo móvil, y distintos estimativos colocan el porcentaje de usuarios que reacciona negativamente a un sitio lento entre el 70 y el 90%. El scrollytelling es caro y demanda computing power que buena parte de los usuarios puede no tener/no querer poner a disposición de ver cuánto cobras el kilo de fiambre.
Control y legibilidad - Hace unos años, escribí una serie de artículos sobre brutalismo web, para Nada Respetable. Cuando discutí la homogeneización de la estética en internet, mencioné cómo bootstrap y recursos similares habían generado incentivos para construír el mismo sitio 700 veces, ofreciendo herramientas que lo hacían costo-efectivo, y cómo eso había seteado expectativas para clientes y usuarios. El scrollytelling, como cualquier topología web que no sea “convencional”, tiene una barrera de entrada que la vuelve difícil de negociar. Los clientes quieren comisionar sitios que crean que van a tener un ROI positivo. Y los usuarios quieren un sentido de control. Todos los involucrados son adversos al riesgo. Cualquier innovación va a suceder, o a la sombra de Silicon Valley, o probandole ROI a los clientes y comodidad a los usuarios.
Me gusta el vino
Desde que ganamos e lmundial, y a la luz de nuevas expresiones de post-peronismo, se fortaleció cierto optimismo nacionalista argentino. En esta línea, triunfa la narrativa de que vamos a volvernos potencia, a fuerza de exportar software, algunos recursos mineros - y quizás, carne. Pero siento que no se está apreciando el lugar que puede llegar a ocupar nuestro vino.
Somos el quinto productor de vino en el mundo. Y en la última década, hubo una diversificación notable, de la mano de bodegas pequeñas y medianas, apostando a cepas y blends muy nuestros y muy raros.
Creo que hay un potencial innovador enorme. Podemos fortalecer el posicionamiento de Argentina como laboratorio y pionero vitivinícola.
Podemos exportar expertise tecnológico, podemos exportar material militar, y materias primas, pero también podemos propogar por el mundo nuestra concepción del disfrute y los productos que la representan. Estados Unidos, como imperio, exportó petróleo y circuitos integrados, pero también exportó guerra, y exportó a Iron Man.
Te deseo una gran semana,
Aaron